Comenzamos esta semana señalando algunos puntos interesantes relativos a la reestructuración del libro.
Lo primero que cabría resaltar es el hecho de la visión global. La madurez suele conllevar aparejada cierta sabiduría, más profunda en algunos casos y definitivamente menor en otros. No seré yo el que defina cuál de los dos podría aplicárseme. Pero sí se traduce algo de ello.
Cuando escribí Utopía, con cierto ánimo crítico, lo hice según las circunstancias y percepciones que entonces tenía del mundo que me rodeaba. Muchas de ellas continúan teniendo validez hoy en día, pero la candidez de la juventud hizo que pasara por alto otros tantos.
Es el momento de contemplarlos antes de cerrar la edición.